El método Saam

Orígenes:

Este método de acupuntura  nació  en Corea, hace aproximadamente 400 años, fue creado por uno de los tres grandes médicos de la dinastía Chosun de Corea (1392-1910), el Maestro Saam.  Este método es relativamente moderno si lo comparamos con el método tradicional chino, se estima que se publico el manuscrito original entre los años 1644 y 1742.

Se dice que Saam, estuvo meditando durante trece años sobre los enigmas del ser humano, hasta que pudo alcanzar la comprensión del enigma, entendiendo la forma en que actúa la energía del ser humano y como trabajarla con la acupuntura, así desarrollo y simplifico una técnica eficaz para reequilibrar la energía en el ser humano basada en la teoría del Yin-Yang, los cinco elementos y en los textos clásicos de medicina china como el Huangdi Nei Jing.

Los cinco elementos:

Madera       Fuego       Tierra       Metal       Agua

Durante 400 años esta técnica ha sido olvidada ya que tuvo que ser ocultada, siendo reencontrada y estudiada de nuevo hace muy pocos años.

Tratamiento:

Este método trata al paciente de manera integral, cuerpo, mente e incluso enfermedad están siempre relacionados y aunque actúan de diferente manera siempre dependen y se relacionan unos con otros. La enfermedad es causada por un desequilibrio energético, pudiendo ser producido por un desequilibrio exterior (alimentación, traumas, climatología…) o por una causa interior (emociones), dicho desequilibrio de la energía , causara una alteración en las funciones orgánicas, causando así la enfermedad.

La acupuntura Saam equilibra de manera rápida esta energía, ya que actúa directamente sobre la causa base de la enfermedad.

Este método de acupuntura es muy seguro de cara al paciente, se utilizan agujas muy finas, pero a diferencia de la acupuntura china solo se utilizan los puntos ubicados en las extremidades del cuerpo, por debajo de codos y rodillas (son los puntos relacionados con los cinco elementos, los antiguos puntos Shu), los tratamientos suelen durar entre 30 minutos y una hora.

Fragmento del libro Neijing